domingo, 28 de abril de 2013

Conciliar o complicar


En toda iglesia hay problemas: problema del pastor con un miembro, del pastor con algunos hermanos, entre dos grupos en la iglesia, entre dos hermanas.
El pastor tiene la competencia de ser un factor de solución, no de complicación. Mal haría que de primeras él exclame: “¡Aquí soy el pastor y yo decido!”. El no puede inclinarse a defender sus intereses, es un administrador del rebaño. 
Yo preferiría que él pierda el puesto a causa de inclinarse por una causa justa, que consentir lo anómalo por asegurar su ingreso económico.
Haber aceptado el pastorado es lidiar con personas no con objetos, y las personas son complejas, cambiantes, amigables y hasta desleales.
El liderazgo cercano al pastor, en sus reuniones deben predecir los conflictos y esto no significa “declarar derrota”, sino anticiparse a posibles problemas interpersonales. Cada miembro sabe sus atribuciones y derechos, al conocer los estatutos de la organización. En este sentido, las iglesias independientes, comunidades cristianas, y mega iglesias van en desventaja. Ellos tienen un sistema piramidal y que legitiman la autoridad pastoral que está en la cúspide, por la imagen exitosa y prosperada que proyecta.
Por ejemplo, si se desea que una iglesia denominacional estatutaria no tenga quejas con su tesorero, él debe mantener un monto de dinero como caja chica y depositar el resto en una cuenta de banco. Además, sustentar todo egreso con boletas y facturas, y recibo en caso de los honorarios al pastor.
Las rivalidades entre el liderazgo y ministerios se disiparía, si todas la áreas de servicio fueran rotativas. En un mes, Juan Pérez sería diácono, el siguiente participaría en el ministerio de alabanza, el tercero en los grupos de hogares. Así, ninguna creerá ser dueño de algo.
Pero ¿Qué hacer en caso de surgir un conflicto de partes? Las partes son los implicados del conflicto. Comunmente uno es el reclamante, ante otro que tiene mayor poder.
Esto debe ser analizado por el pastor, si es un conflicto entre dos hermanos y por un tema de carácter muy personal. Pero si es entre grupos de hermanos, el análisis debe realizarlo con sus líderes. Según el tipo de conflicto, el pastor hará de mediador, arbitro, negociador o conciliador. Esto no es asunto de una sola reunión, puede ser progresivo y paralelo a esto, el mediador debe orar. No aludir este asunto de modo indirecto en su sermón dominical.
Como mediador debe ser imparcial, neutral, defender los valores y principios bíblicos. El árbitro tiene mayor grado de autoridad, y las partes deben someterse a su fallo. El negociador, y en caso de la iglesia, no se refiere a asuntos de dinero, sino a que cada parte “gane algo”, cuando cedan parte de sus pretensiones. El conciliador lidera en medio de mal entendidos, asuntos de ofensas.
Con la sabiduría espiritual habrá de definir el problema, analizar las pretensiones e intereses de las partes. La Biblia presenta muchos casos de jurisprudencia (reseña de resolución de casos judiciales) que es asidero para elaborar la propuesta de solución. Al fin de cuentas, el conflicto, permitió ver algún aspecto que se estaba descuidando, o que se daba un trato desigual, sin querer, a ciertos hermanos.
En caso extremo, que sin haber conciliación o las otras formas presentadas, una de las partes decide irse de la iglesia, el pastor debe buscar la oveja, la otra parte también. Insistir, usar el poder del amor.

jueves, 25 de abril de 2013

Batallando con el mal carácter

Otra pregunta de los lectores (la resumí):

"Hace dos años que conocí al Señor, y estoy congregando en la iglesia, pero tengo un gran problema con mi carácter y reconozco que no se dominarme al hablar con mi pareja. Siempre estoy echándole cosas en cara, no soy feliz pues el no está convertido. Tantos los problemas de pareja que pasamos, hay falta de respeto por ambas partes. Mi problemas es de depresión, sus problemas son los celos. Él está con cáncer de próstata. No soy capaz de abandonarle y me siento que las fuerzas me fallan..."

Es loable encontrar un cristiano como tú, que tiene el valor de quitarse la careta y pedir ayuda. Los desvaríos en el carácter son usuales. ¿Quién puede negarlo? Ni el mismo apóstol Pablo era infalible. El dijo de si mismo: "Miserable hombre de mí ¿quién me librará de este cuerpo de muerte? Lo que quiero hacer eso no hago, y hago lo que no quiero hacer" Rom 7:7-24

Debes practicar una vida espiritual fervorosa, a solas con el Señor, uno no puede seguir siendo el mismo. Si somos frecuentes a encontrarnos con su presencia, en búsqueda personal, será el mejor filtro para retener los elementos que enturbian el carácter. Estar tanto con Jesús, pues su carácter se nos irá pegando, habrá menos libertad para enojarse y herir al cónyuge.

Pasado ese punto, tu vida está apta para que el Espiritu Santo produzca el fruto: de amor, paciencia, benignidad... 

Veo como un hecho lamentable que el tenga esa enfermedad. No se en que etapa estará, pero en la medida que tu demuestres ser nueva criatura en Cristo, será un factor para que el organismo de tu esposo responda al tratamiento. Eso dijo un oncólogo en una conferencia.

sábado, 20 de abril de 2013

Sansón, ungido, fuerte pero...


Esta pregunta llegó a nuestro buzón:
¿Cree usted que se puede calificar de exitoso el ministerio de Sansón, sabiendo la conducta que llevó y la forma que murió?
A diferencia de los predicadores post modernos, yo conceptúo el éxito como la pericia para saber administrar entre el logro y el fracaso. La popularidad y el dinero son bienes extra patrimoniales y patrimoniales que el mundo sustenta, y suele haberse infiltrado en los círculos teológicos cristianos.
Entonces si hablamos de logro y fracaso, deberíamos inclinarnos hacia el desarrollo de valores. Uno puede ser la calidad del servicio, o su parte opuesta, la madurez para asumir las cosas que se alejaron, y eso para mí es éxito. Sobre esto último, pues diría que eres exitoso en la medida que no te deprimes por los desaciertos, aquellos que están fuera de tu alcance, no me refiero a problemas interpersonales que tú mismo generaste por tu intolerancia.
Sansón es el arquetipo de un ministerio su géneris: un fortachón que se enamoraba de filisteas para eliminar a los paisanos de ella. Era como meterse a sabiendas, en la boca del lobo. También me causa asombro, que en el libro de Jueces se justifica tal hábito, con la frase: “esto venía de parte de Jehová”.
Otro aspecto, es que Sansón no era un ser que abusaba de su fuerza. Porque cada vez que venía el Espíritu del Señor sobre él, se dotaba de una mega fuerza para doblegar a los enemigos asiduos de Israel. Es como decir que la unción era su “energizante” y vitaminas. Por tanto, el sagrado Espíritu fue un factor movilizador para acciones en que alguien necesitó ser competente, inclusive, físicamente.
Al respecto, hay diversas citas que concuerdan con lo expuesto, el verbo griego es energéo, significa, ejercer actividad, operar, mostrar el poder. Algunos ejemplos donde está el verbo:Y hay diversidad de operaciones, pero Dios, que hace todas las cosas en todos, es el mismo”.  1 Co 12:6, Pero todas estas cosas las hace uno y el mismo Espíritu, repartiendo a cada uno en particular como él quiere.” 1 Co 12:11 “Aquel, pues, que os da el Espíritu y hace maravillas entre vosotros, ¿lo hace por las obras de la Ley o por el oir con fe?” Gal 3:5 “Esta fuerza operó en Cristo, resucitándolo de los muertos y sentándolo a su derecha en los lugares celestiales” Efe 1:20
A lo mejor de ahí, se basan los Testigos de Jehová para con una mala lógica, afirmen que el Espíritu es una fuerza activa.
Entonces, posicionemos a Sansón como un hombre dotado del poder del Espíritu, ahí fue su éxito, su logro.
Haciendo una lectura detenida en el libro de Jueces, vemos que sus matrimonios frustrados tenían el objetivo de inmiscuirse dentro del territorio enemigo. Sansón, por licencia de Jehová tiene este accionar. Pero, de esto no se puede marcar la pauta para un actitud cristiana. Fue un caso excepcional, y no debe ser repetido por ningún creyente, que se fundamenta en el imperativo: “No hagáis yugo desigual con los incrédulos”.
El otro detalle de su éxito, fue que ya siendo prisionero y burla de los filisteos, debido a la traición de Dalila, se arrepintió de todo corazón, por haber contado el secreto de su fuerza, no por haber tenido una esposa extranjera. Sansón muestra valor inigualable al solicitar fuerza al Señor para tumbar el palacio filisteo y morir con los enemigos de Israel. Si fuera un suicidio, Dios no le hubiera restituido las fuerzas.
Este juez atípico de Israel, es figura de Jesús, “que muere en propiciación por los pecados”.
Leamos con detenimiento Las escrituras, para evitar ser legalistas con algunos personajes bíblicos. Comprendamos que todos ellos no fueron perfectos, de este modo, la mirada se centrará en aquel cordero perfecto y sin pecado. ¡Aleluyah! 

sábado, 13 de abril de 2013

Tiempo de cantar, y tiempo de conquistar...


Me gustaría escuchar a un grupo de jóvenes pentecostales
cantar esta canción a capela, arrodillados, 
y luego salir a buscar a los perdidos.

lunes, 8 de abril de 2013

Tipos de hombres que Dios levantó...

según las etapas históricas, y para alcanzar sus propósitos. Las listas consideran algunos nombres.
Observaciones:
Patriarca. Un tipo que tenía una fe espectacular. En el caso se Matusalen, no vivió en el Edén, pero creyó al relato de la creación. En segundo lugar, se mantuvo fiel a la promesa. Por último, el patriarca supo administrar los hijos que Dios le dio. El objetivo era seguir la línea familiar, para propiciar la consolidación del pueblo del Señor.
Líder. Capacidad para abrir surco y guiar al grupo social para el alcance de su meta o la supervivencia.
Sacerdote. Persona disciplinada en su apariencia y oficio espiritual. Era como el puente entre Jehová y su pueblo. A pesar que los ritos eran rutinarios, no debía realizarlo a la ligera ni con apatía.
Juez. No era un administrador de justicia "desde el escritorio" como lo hace un juez o el anciano del pueblo para dilucidar conflicto de intereses o castigar actos que atente contra el bien personal. El juez era un caudillo que reivindicaba la propiedad de todo el pueblo, castigando o disuadiendo el abuso de los ejércitos enemigo.
Rey. Ungido para la función de administrar el estado de Israel. Su gestión era favorable si hacía lo bueno ante los ojos del Señor. Su gobierno se iba en picada, al entregarse a los ídolos.
Profeta. Hombre valeroso, porque muchas de sus declaraciones eran exhortaciones a la pobreza espiritual. Algunas veces se anticipaba al derrumbe de reinos, y también escribió anticipos sobre aspectos del Mesías por venir. 



viernes, 5 de abril de 2013

Rompamos las ataduras

Cada mes, la prensa atemoriza a la opinión pública con elementos sin asidero razonal. Por ejemplo, al primero fue que el 21 de diciembre se cumplía el calendario Maya y venía el fin del mundo. Lo segundo, fue la posibilidad de un temible Papa negro (el escogido es promotor del marianísmo). Ahora, presentan al presidente nor coreano como el que desatará una guerra apocalíptica.

Estimados hermano, nuestro reino no es de este mundo. Así que, estos rumores no deben marcarnos la pauta. Ninguno de estas cosas debe perjudicar el ministerio, ni el testimonio evangelizador. Los temas sociales que atentan al bien común, si debemos prestar atención, como aplaudir si todos los comerciantes de La Parada se trasladan a Santa Anita, o a la Tierra Prometida (lugar denominado así por la alcaldesa Villarán). 

Algo entiendo hoy, hace un mes compartía sobre el texto de Efesios: "el espíritu que opera sobre los hijos de desobediencia". La aplicación es simple: obedece al Señor, sino quieres ser monitoreado por el fuerzas espirituales.
Algo entiendo hoy, ¿qué tan libres de ataduras está nuestra congregación?

¡Qué Dios levante a piadosos hermanos en Palabra de liberación! Persevera o despierta la expectativa, porque este mes de abril puedas hacer retroceder el imperio de las tinieblas, que a lo mejor, se enquistó en algunos hermanos.